Finalizó la 3° cohorte del curso:
N u e v a s T e c n o l o g í a s e n e l C o n t e x t o E d u c a t i v o N i v e l I.
N u e v a s T e c n o l o g í a s e n e l C o n t e x t o E d u c a t i v o N i v e l I.
N u e v a s T e c n o l o g í a s e n e l C o n t e x t o E d u c a t i v o N i v e l I:
Modalidad Presencial
Carga horaria 40 hs reloj
Dictamen 8334, Resolución 1754/10
Puntaje 0,48
Capacitadora: Prof. Liliana Sartori
Carga horaria 40 hs reloj
Dictamen 8334, Resolución 1754/10
Puntaje 0,48
Capacitadora: Prof. Liliana Sartori
Síntesis de la propuesta
En la actualidad los niños y jóvenes crecen rodeados de tecnología digital a la que tienen acceso a través de sus hogares, cybers, centros comerciales y de esparcimiento, etc. La escuela hoy no puede quedar ajena a esta realidad y los docentes deben estar preparados para ofrecerles a sus alumnos oportunidades de aprendizaje enriquecidas por las TIC.
Ante la pregunta ¿Qué dificulta, hoy, que los docentes integren a las Tecnologías de la Información y la Comunicación en su forma de enseñar?
Debemos tener en cuenta distintas variables que les impide estar preparados para los cambios que ocasiona la integración tecnológica en el aula, entre ellas: tiempo, entrenamiento y recursos.
Los docentes necesitan:
El tiempo para aprender a usar el “Hardware y el Software”, tiempo para planificar proyectos acordes a los diseños curriculares en vigencia y tiempo para trabajar en conjunto con otros docentes.
El entrenamiento que les facilite capacitarse incorporando las Nuevas Tecnologías como recursos para gestionar el trabajo personal y como herramientas que permiten incrementar la productividad, promover la creatividad y facilitar el aprendizaje en los alumnos.
Los recursos que les permitan potenciar el uso de los elementos tecnológicos con que cuente la escuela para el desarrollo de la clase, y la elección de software apropiado para respaldar la planificación áulica, sin la cual la integración no puede darse.
Estar capacitado para usar las Tecnologías de la Información y la Comunicación y saber cómo esas tecnologías pueden apoyar el aprendizaje de los alumnos, es un desafío para la capacitación profesional del docente.
Los docentes deben estar preparados para empoderar a sus alumnos con las ventajas que les aportan las tecnologías. Las escuelas deben contar con profesionales equipados tanto con recursos tecnológicos como con las destrezas necesarias para utilizarlos y, que además puedan enseñar eficazmente los contenidos de las materias incorporando en éstas conceptos y destrezas de las TICs. Las conexiones con el mundo real, el material de fuentes primarias y las herramientas referidas a la recolección de datos y de análisis, son sólo algunos de los recursos que aportan a los docentes herramientas para mejorar las oportunidades de comprensión de conceptos en sus alumnos.
Ante la pregunta ¿Qué dificulta, hoy, que los docentes integren a las Tecnologías de la Información y la Comunicación en su forma de enseñar?
Debemos tener en cuenta distintas variables que les impide estar preparados para los cambios que ocasiona la integración tecnológica en el aula, entre ellas: tiempo, entrenamiento y recursos.
Los docentes necesitan:
El tiempo para aprender a usar el “Hardware y el Software”, tiempo para planificar proyectos acordes a los diseños curriculares en vigencia y tiempo para trabajar en conjunto con otros docentes.
El entrenamiento que les facilite capacitarse incorporando las Nuevas Tecnologías como recursos para gestionar el trabajo personal y como herramientas que permiten incrementar la productividad, promover la creatividad y facilitar el aprendizaje en los alumnos.
Los recursos que les permitan potenciar el uso de los elementos tecnológicos con que cuente la escuela para el desarrollo de la clase, y la elección de software apropiado para respaldar la planificación áulica, sin la cual la integración no puede darse.
Estar capacitado para usar las Tecnologías de la Información y la Comunicación y saber cómo esas tecnologías pueden apoyar el aprendizaje de los alumnos, es un desafío para la capacitación profesional del docente.
Los docentes deben estar preparados para empoderar a sus alumnos con las ventajas que les aportan las tecnologías. Las escuelas deben contar con profesionales equipados tanto con recursos tecnológicos como con las destrezas necesarias para utilizarlos y, que además puedan enseñar eficazmente los contenidos de las materias incorporando en éstas conceptos y destrezas de las TICs. Las conexiones con el mundo real, el material de fuentes primarias y las herramientas referidas a la recolección de datos y de análisis, son sólo algunos de los recursos que aportan a los docentes herramientas para mejorar las oportunidades de comprensión de conceptos en sus alumnos.
Destinatarios
Los destinatarios de este curso serán los docentes de todos los niveles y modalidades de la Provincia de Buenos Aires.
Aún se encuentra abierta la
inscripción para la 3° cohorte.
P r o x i m a m e n t e . . .
M u l t i m e d i a p a r a D o c e n t e s:
Modalidad Presencial
Carga horaria: 37 Hs. Reloj
Dictamen 8174, Resolución 4602/09
Puntaje 0,48
Capacitadora: Prof. Liliana Sartori.
Carga horaria: 37 Hs. Reloj
Dictamen 8174, Resolución 4602/09
Puntaje 0,48
Capacitadora: Prof. Liliana Sartori.
Síntesis de la propuesta
Las tecnologías de la información y la comunicación han provocado cambios sustanciales en todos los sectores de la sociedad y la comunicación audiovisual no ha sido una excepción: desde la conversión de la señal de TV analógica a digital hasta la aparición de redes para compartir vídeos y fotografías, existen un conjunto de prácticas comunicativas, que en mayor o menor medida, han sido afectadas por la implantación de las TIC. En los procesos de creación y producción audiovisual, las tecnologías de la información y la comunicación han provocado que el rol de las personas haya devenido más activo, o al menos más visible, y prueba de ello son todas las iniciativas de trabajos audiovisuales online realizados por usuarios “anónimos”.
Los niños y los adolescentes de hoy no son la excepción, hablan el lenguaje de las imágenes: las fotos y los videos son sus nuevos formatos de expresión.
Sin embargo, como planteaba Xavier Berenguer (1991) “no está garantizado que las imágenes, cada vez más abundantes a escala planetaria, promuevan una cultura y una civilización en una dirección verdaderamente tolerante y creativa. Esto depende al final de las intenciones de los hombres y las mujeres que usan la tecnología […] que sirven para producir estas imágenes.” Y es que la imagen no es tanto algo que se ve sino algo que se piensa. (Zunzunegui; 2003)
Es por eso que la escuela no puede quedar ajena a esta realidad y los docentes deben estar preparados para ofrecerles a sus alumnos oportunidades de aprendizaje enriquecidas con el lenguaje de las imágenes generadas por las TICs.
Incorporar estas nuevas formas de comunicarse de los niños y adolescentes, aprovechar el potencial expresivo que tienen cuando se apropian de estos lenguajes es una tarea productiva y enriquecedora. Incluso podríamos arriesgar que desconocer este hecho y educar como si el contexto no incidiese sobre los modos de expresión y manipulación de la información de los chicos resultará un elemento obturador de la circulación del conocimiento.
Observar qué nuevos espacios de expresión están ocupando hoy los alumnos de la escuela es un modo de empezar a ponernos en contacto con sus modos de expresión. Es evidente, en este sentido, que la imagen y el video son dos de los formatos preferidos por los chicos. Incorporarlos al ámbito educativo puede llegar a ser un modo de reorientar la tarea docente. Las experiencias existentes parecen indicar que hacerlo no será en vano.
Estar capacitado para usar las Tecnologías de la Información y la Comunicación y saber cómo esas tecnologías pueden apoyar el aprendizaje de los alumnos, es un desafío para la capacitación profesional del docente.
Los niños y los adolescentes de hoy no son la excepción, hablan el lenguaje de las imágenes: las fotos y los videos son sus nuevos formatos de expresión.
Sin embargo, como planteaba Xavier Berenguer (1991) “no está garantizado que las imágenes, cada vez más abundantes a escala planetaria, promuevan una cultura y una civilización en una dirección verdaderamente tolerante y creativa. Esto depende al final de las intenciones de los hombres y las mujeres que usan la tecnología […] que sirven para producir estas imágenes.” Y es que la imagen no es tanto algo que se ve sino algo que se piensa. (Zunzunegui; 2003)
Es por eso que la escuela no puede quedar ajena a esta realidad y los docentes deben estar preparados para ofrecerles a sus alumnos oportunidades de aprendizaje enriquecidas con el lenguaje de las imágenes generadas por las TICs.
Incorporar estas nuevas formas de comunicarse de los niños y adolescentes, aprovechar el potencial expresivo que tienen cuando se apropian de estos lenguajes es una tarea productiva y enriquecedora. Incluso podríamos arriesgar que desconocer este hecho y educar como si el contexto no incidiese sobre los modos de expresión y manipulación de la información de los chicos resultará un elemento obturador de la circulación del conocimiento.
Observar qué nuevos espacios de expresión están ocupando hoy los alumnos de la escuela es un modo de empezar a ponernos en contacto con sus modos de expresión. Es evidente, en este sentido, que la imagen y el video son dos de los formatos preferidos por los chicos. Incorporarlos al ámbito educativo puede llegar a ser un modo de reorientar la tarea docente. Las experiencias existentes parecen indicar que hacerlo no será en vano.
Estar capacitado para usar las Tecnologías de la Información y la Comunicación y saber cómo esas tecnologías pueden apoyar el aprendizaje de los alumnos, es un desafío para la capacitación profesional del docente.
Destinatarios
Los destinatarios de este curso serán los docentes de todos los niveles y modalidades de la Provincia de Buenos Aires.
